RECICLAR RESTOS DE JABÓN

Si me conocéis, aunque sea un poquito, sabréis ya que no me gusta tirar las cosas así por que sí, ya no solo por el hecho intentar poder aprovechar al máximo la inversión hecha con el o los productos, sino además el hacerlo es dar un pasito más para una vida más ecofriendly.

Así que hoy os comparto unas ideas para poder darle una segunda e incluso tercer vida a esos restos de jabón que se van acumulando en casa, de un modo muy sencillo y ya veréis que no vais a necesitar emplear demasiados ingredientes complementarios.

BOLSAS AROMÁTICAS

Un excelente modo de reciclar esos restos de jabón sólido que tenemos en casa, es hacer bolsitas aromáticas para perfumar nuestros armarios y cajones.

Para ello solo vas a necesitar:

Restos de jabón.

Bolsas de tela.

Cinta.

Opcional: cáscaras de cítricos rallados, especias (como el romero seco triturado, la lavanda, el clavo de olor, nuez moscada, etc.) y/o aceites esenciales.

El procedimiento es tan y tan sencillo y obvio que inclusive podría no escribirlo, pero vamos a ello.

Rallaremos los restos de jabón y rellenaremos las bolsitas de tela y las ataremos con la cinta, y ya tenemos unas bolsas perfumadas para poner en el interior de nuestros armarios o en los espacios que prefiramos para disfrutar del olor.

Os he puesto como opcional añadir otros ingredientes, como las especias o los aceites esenciales, eso dependerá de cómo sean los restos de jabones que tenéis, es decir, si tienen un aroma muy pronunciado o son de esos más bien neutros.

Así pues, una idea para potenciar su olor, o realizar mezclas aromáticas a vuestro gusto, es colocar en un frasco con tapa el jabón rallado combinado con los ingredientes que deseéis. 

Si son ingredientes en seco, basta con que lo agitéis para que quede todo bien mezclado y ya podéis rellenar las bolsitas. En el caso de realizar mezclas aromáticas con aceites esenciales por ejemplo, es más aconsejable hacer la mezcla en el frasco, taparlo y guardarlo durante unas 2 semanas (día arriba, día abajo), para que se mezclen bien las esencias y se intensifiquen a la vez la mezcla de aromas.

Otros tips para realizar las bolsitas: El algodón liviano, organza, la muselina y la seda van a ser las mejores telas para poder preparar las bolsitas, pero vamos, tampoco es cuestión que os comáis mucho la cabeza. También podéis optar por reutilizar esos pañuelos de tela que ya usáis, y colocar la mezcla en el centro, y anudar en forma de saquitos.

JABÓN LÍQUIDO

Otra opción para darle una segunda vida a los restos de jabón que tenemos en cassa, es preparando un jabón líquido casero.

Cierto es que a priori el que os indico es para que lo podáis emplear para lavar las manos, pero también puede seros útil para la limpieza de otras superfícies. 

Pero bueno, nos centramos con la idea que lo vamos a utilizar para lavar las manos, así pues, será bueno que procuremos añadir un aceite esencial con propiedades antibacterianas para potenciar sus beneficios. ¿Ejemplos? El árbol de té, el aceite de limón o el aceite de lavanda (con 8-10 gotas será suficiente).

Para ello necesitaremos:

200 gramos de restos de jabón en barra

75 ml de agua

40 ml de glicerina

8-10 gotas de aceite esencial antibacteriano de tu preferencia.

El procedimiento inicial será como el anterior, rallaremos el jabón pero en esta ocasión hasta que se quede casi en polvo. En un cazo pondremos el agua hasta que llegue a ebullición y cuando ya hierva agregaremos el jabón rallado y la glicerina.

Lo removeremos durante unos minutos hasta que quede todo bien integrado. Por cierto, si ves que está muy espeso, puedes añadir más agua, y si ves que está demasiado líquido, añade más jabón y glicerina.

Una vez ya con un líquido uniforme añadiremos las gotas del aceite esencial antibacteriano y volveremos a mezclar todo.

¡Y listos! Deja que se enfríe bien y ya puedes envasarlo en un recipiente para jabón líquido. 

Como plus, si queréis en lugar del agua, podéis utilizar algún tipo de infusión o té, depende de cómo queráis que huela, las propiedades que más o menos queréis que tenga, etc.

Por cierto, que en otras ocasiones me lo habéis preguntado. La glicerina sirve para suavizar las manos y es un ingrediente que se puede encontrar muy fácilmente en una droguería o farmacia, además de ser muy económico y cunde una barbaridad.

EXFOLIANTE

Como bien sabréis ya, los exfoliantes son productos clave para poder mantener nuestra piel limpia, libre de impurezas y protegida a la vez.

Productos en el mercados, hay para todo los gustos y necesidades, pero si tenéis restos de jabón en casa y no queréis usarlos para las dos opciones anteriores y os apetece hacer un exfoliante casero ideal para eliminar las células muertas y suavizar la piel, no os perdáis las siguientes líneas.

Para realizar el exfoliante necesitaremos:

100 gr de restos de jabón

50 ml de agua

20 gr de linaza o avena molida

Como en los anteriores, rallaremos los restos de jabón y en esta ocasión los pondremos en un cazo a baño maría hasta que se derritan.

Agregaremos el agua y la linaza o la avena molida, mezclaremos bien y lo retiraremos del fuego, y lo dejaremos reposar durante unos 5 minutos para después ponerlo en un molde o moldes pequeños. 

Lo dejaremos solidificar y ya tendremos listo un jabón exfoliante casero.

Aunque imagino que ya sabréis cómo se usan los jabones exfoliantes, os recuerdo que pasa  su correcto uso tenemos que humedecer la piel y frotar con suaves movimientos circulares con el jabón. Puedes también a posteriori, frotar con una esponja vegetal después de haber aplicado el jabón. Enjuagar con abundante agua y listos. Se aconseja un uso de entre 2 y 3 veces por semana.

Y nada, esto es todo por hoy.

No sé si conocíais estos métodos para reciclar restos de jabón, si no es así, ya no tienes excusa para no desecharlos y aprovecharlos, ya que como podéis comprobar, son recetas muy sencillas y útiles.

¡Un saludo maj@s!