Somos lo que comemos. ¿Cuántas veces habremos escuchado esta frase e inclusive la habremos dicho? No os pongáis a contar, que tod@s sabemos que son muchas.
La elección de lo que comemos y cómo lo comemos da lugar a un sinfín de posibilidades, y esto es un reflejo de nuestras actitudes hacia nosotros mismos e inclusive hacia nuestro entorno, porque los alimentos que comemos tienen una enorme influencia en nuestra salud, y en el estado de la piel.
Es decir, llevar a la práctica ciertas dietas o estilos de alimentación, producen un impacto directo en nuestra piel, y de eso os voy a hablar hoy en este artículo.