PREGUNTAS FRECUENTES Y CURIOSAS. VOL 7

Me llena de orgullo y satisfacción... anunciaros que ya vamos por el séptimo artículo dedicado a las preguntas frecuentes y curiosas que vosotr@s, los protagonistas de todo este sarao, me vais realizando vía mail, mensaje en Facebook, o en los comentarios de los mismos posts.

En esta ocasión, he hecho una pequeña recopilación de algunas de las preguntas que me vais haciendo sobre alimentación. Supongo que el hecho de encontrarnos en plena "operación bikini", hace que se despierte vuestra curiosidad para poder perder unos cuantos kilitos o mantenerlos a raya.

Antes de pasar al lío, me gustaría aclarar algo. No soy nutricionista, ni pretendo realizar la labor de ninguno de estos profesionales. Simplemente me limito a escribir de lo que sí sé, dados mis conocimientos sobre nutrición adquiridos durante mis estudios,  y experiencia tanto personal como laboral, y sobre lo que voy consultando con "colegas" del sector de la salud, los cuales sí tienen conocimientos veraces sobre nutrición. 

Y recordaros, que siempre, siempre, siempre, lo mejor es acudir a profesionales cuando tengáis una duda para que puedan abordar vuestro problema de un modo individual.

Ahora quizás  he tirado piedras sobre mi tejado, pero creo que es ético comentároslo. 

A veces, nos fiamos tanto de todas las burradas que circulan por la red que descuidamos algo esencial, nuestra salud. Por lo que es bueno estar informados, pero tal y como os acabo de comentar, lo mejor es siempre acudir a un profesional.

Dicho esto, ¡vamos a por las preguntas!

¿EL PAN ENGORDA?

El pan sí que engorda, como lo hacen todos los alimentos, aunque nos duela reconocerlo, ya que el único alimento libre de calorías es el agua. Ya os lo comenté en otro post, pero como es una de las preguntas frecuentes, he considerado volver a dar una pincelada.

Claro está que no todos los alimentos nos aportan las mismas calorías ni tienen los mismos efectos en nuestra salud, al igual que tampoco son iguales a la hora de que dichas calorías sean "consumidas" por nuestro metabolismo.

Por norma general, el pan aporta unas 250kcal por cada 100 gramos, por lo que es considerado un alimento que hay que consumir con moderación, aunque no nos aporte muchas grasas, pero nunca eliminarlo.

En cuanto al tipo de pan, los nutricionistas nos aconsejan consumir preferiblemente, los panes integrales antes que el blanco, ya que los primeros tienen un mayor contenido en fibra, aunque los dos aporten las mismas calorías.

Y ya que hablamos del pan, recordaros que en uno de los artículos sobre preguntas, os hablé sobre si engorda más la miga o la corteza. Podéis recordarlo aquí.

¿EL ACEITE DE GIRASOL ES PERJUDICIAL PARA NUESTRA SALUD?

Much@s afirman que a la hora de freír dejemos a un lado el aceite de girasol ya que puede ser perjudicial para nuestra salud y que mejor optemos por el aceite de oliva, y que es el aceite por excelencia.

Y la verdad, es que esto no es del todo cierto. 

A ver, claro está que el aceite de oliva es el aceite rey por excelencia gracias a las infinidades de propiedades y beneficios que puede aportarnos a nuestra salud, por lo que es una de las opciones más recomendadas y usadas en la cocina. Pero no por ello, debemos dejar a un lado los demás aceites, tales como el de girasol, maíz, soja, entre otros, que también son beneficiosos para nuestro organismo.

Centrándome en la preocupación de esta lectora, de si el aceite de girasol es perjudicial o es menos recomendable a la hora de ser usado para freír, deciros que la diferencia principal que radica entre ambos aceites es que, el de oliva es rico en grasas monoinsaturadas, y el de girasol es rico en grasas poliinsaturadas, ambas beneficiosas para nuestra salud  y la de nuestro corazón (cardiosaludables).

Y que la ventaja que nos ofrece el de oliva es que, a la hora de ser cocinado resiste más la temperatura que el de girasol, por lo que se estropea menos y puede ser reutilizado más veces.

Por lo que no debemos desterrar el aceite de girasol de nuestra dieta, ya que las grasas poliinsaturadas que os he comentado, intervienen en múltiples funciones orgánicas, desde el crecimiento y desarrollo hasta la producción de sustancias reguladoras de la presión sanguínea.

Así pues, el uso del aceite de girasol, está totalmente recomendable, y para nada va a ser perjudicial para nuestra salud, al contrario.

¿EL ZUMO DE NARANJA PIERDE SUS VITAMINAS SI NO NOS LO BEBEMOS RÁPIDO?

Seguro que tod@s l@s aquí presentes habéis escuchado o incluso habéis dicho la frase de "bébete el zumo ahora que está recién exprimido, que si no se pierden las vitaminas".

Pues según los expertos, aunque es totalmente cierto que las vitaminas se van perdiendo con el paso del tiempo ya que al entrar en contacto con el oxígeno la vitamina C, al ser un potente antioxidante, va perdiendo sus propiedades, este proceso no es tan rápido como se cree, ya que si conservamos un zumo tapado en la nevera, sus vitaminas se mantienen, aproximadamente, durante nada más y nada menos que 12 horas.

Claro está que cuando te haces un zumo, normalmente es porque te apetece en ese momento, ¿no?

¿LA FRUTA DESPUÉS DE LA COMIDA ENGORDA?

Existe la creencia que la fruta después de comer entra en un estado de fermentación en nuestro estómago y acaba convirtiéndose en azúcar que nuestro organismo va almacenando en forma de grasa, y eso es totalmente falso.

La fruta tiene las mismas calorías si las tomas antes o después de una comida, vamos que en este caso, es como en las mates, "el orden de los factores, no alteran el producto".

Lo que sí es cierto es que la fruta, por lo general, tiene un alto contenido en fibra, lo que nos provoca sensación de saciedad, por lo que en según que dietas, se recomienda su ingesta antes, lo cual hará que tengas menos hambre después, y por consiguiente comas menos.

Recordad que en una dieta equilibrada y saludable, deben incluirse al menos tres piezas de fruta al día, puesto que son una fuente muy importante de vitaminas y minerales. Cuando tomarlas, os lo dejo en vuestras manos.

¿LOS FRUTOS SECOS ENGORDAN MUCHO?

A ver, no se puede negar que los frutos secos son alimentos bastante calóricos, pero eliminarlos de nuestra dieta para poder perder peso, es un error.

Me explico. Los frutos secos son muy ricos en grasas saludables y tienen propiedades beneficiosas para nuestra salud cardiovascular. Así que la mejor opción es simplemente moderar su consumo, e incluir una pequeña cantidad en nuestra dieta diaria.

No renunciemos a la salud, por unas cuantas calorías.

¿LOS PRODUCTOS VEGETALES FRESCOS SON MEJORES QUE LOS CONGELADOS?

Siempre se ha dicho que las hortalizas y verduras frescas son más "buenas" para la salud que las congeladas. Pero eso solo pasa cuando compras en establecimientos de proximidad o si tienes un chachi huerto.

Pensad que cuando compramos verduras o hortalizas en grandes superfícies, desde su recolección hasta la compra, han pasado por cámaras de refrigeración, por lo que tienen pérdidas de nutrientes importantes.

En cambio, en las verduras y hortalizas congeladas sus características nutricionales se mantienen intactas ya que han estado congeladas nada más recolectarse (o es como debería ser).

Así pues, a no ser que puedas disponer de productos vegetales auténticamente frescos, la opción de consumirlos congelados puede ser incluso más sana.

¿LA LECHE DESNATADA ES MENOS NUTRITIVA QUE LA ENTERA?

Esto en principio es totalmente falso, también dependerá de la leche imagino, pero a priori el proceso al que es sometido la leche para su desnatado, simplemente reduce su contenido en grasa y vitaminas liposolubes como la A, D y E. No obstante, conserva la misma concentración de calcio y proteínas que tenía antes de dicho proceso.

Lo que suele preocupar es que el calcio necesita la presencia de vitamina D para que pueda ser absorbido en el instestino, y puesto que es liposolube se perdería al desnatarla. Sin embargo, este hecho se corrige enriqueciéndola con vitamina D.

¿DEBEMOS ELIMINAR TODOS LOS ALIMENTOS QUE NOS APORTEN GRASAS?

¡Paren rotativas! ¡Que me da algo!

¡Para nada! Las grasas, aunque no nos lo creamos, son nutrientes esenciales para la vida. Es más, el 30% del total de las calorías que deben ser consumidas al día, deben estar aportadas por grasas. Eso sí, con menos de un 10% de grasas saturadas.

¿Y que hacen las grasas en nuestro organismo? Pues nos favorecer la absorción de ciertos nutrientes, como las vitaminas A, D, E y K, tienen un papel importante en la transmisión nerviosa y ayudan a que las membranas celulares estén sanas.

Y no solo eso, las hay que reducen el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.

Así pues, la clave está en reemplazar algunas de las grasas saturadas y trans por las monoinsaturadas o poliinsaturadas, y/o  reducir el consumo de esas grasa saturadas, aunque en algunos casos no eliminarlo, puesto que, al eliminar ciertos alimentos de nuestra dieta que contengan dichas grasas, también estaremos eliminando otros nutientes presentes en dichos alimentos.

Lo que siempre os digo, equilibrio y variedad.

¿ES BUENO PELAR TODA LA FRUTA?

Lógicamente hay frutas que debemos pelar sí o sí a la hora de consumir, pero es falso que debamos pelar toda la fruta.

A ver, la cáscara suele ser una de las partes en las que podremos encontrar más vitaminas, minerales, fibras y carbohidratos, pero a la vez, es el lugar en el que podemos encontrar más sustancias químicas empleadas en la agricultura.

La solución es lavarlas exhaustivamente para poder eliminar cualquier resto químico y comerlas sin pelar.

Y hasta aquí la pequeña recopilación de hoy.

Solo comentaros que podéis encontrar más preguntas y respuestas sobre ello en antiguos posts de Preguntas frecuentes y curiosas, como; ¿es verdad que los productos ligth y los integrales no engordan y te ayudan a adelgazar?, ¿comer de pie engorda más? o ¿saltarse una comida o ayunar hace que perdamos peso con facilidad?, entre otros.

También recordaros que una buena dieta se basa en una alimentación saludable buscando el equilibrio entre los alimentos y nuestra actividad física diaria. Así pues, aunque un alimento sea muy saludable, no debes solo alimentarte del mismo, ni abusar de el, o eliminar por completo ciertos alimentos.

Espero que el artículo os sea de utilidad, y a la vez agradeceros como siempre, la confianza que depositáis en mi.

¡Un saludo maj@s!