¡Hola maj@s!
Ya viernes, y es un ya de "¡por fin!", porque no sé a vosotr@s, pero para una servidora la semana ha sido eterna.
Hoy el post de Mel va de Esos locos bajitos, los niñ@s. Esos seres de los cuales los adultos podemos aprender una infinidad de cosas.
Así que de esto hoy nos va a hablar Mel, de algunas de las cosas que podemos aprender de los niñ@s.
"¡Muy buenos días, corazones! ¿Cómo estáis? Como siempre, si estáis
leyendo esto, y estamos a las puertas del magnífico fin de semana. ¿Qué
estupendos planes tenéis para pasarlo absolutamente genial?
Hoy os vengo a
traer un post con algo de viento fresco y con mucha
energía positiva. ¿Queréis saber de que se trata? ¡Pues allá vamos!
Siempre se
ha dicho, que los niños tienen que aprender de los adultos y de sus propias
experiencias. ¿Pero sabías que los más peques de las casas nos pueden enseñar
muchas cosas a la mayores? Os preguntaréis qué es lo que podemos aprender de
los “enanos”, pues aquí tenéis un lista de seis cosas que ellos son capaces de
hacer.
1.Se ríen de ellos mismos.
En mi caso, he tenido la oportunidad de ver a un bebé de seis meses delante de
un espejo y partirse de risa. ¿Por qué a los adultos nos cuenta a veces tanto
reírnos de las tonterías que hacemos?
2. Nunca pierden la
ilusión. Se despiertan cada día con ganas de jugar, de hacer cosas nuevas, de aprender, de hacer
alguna que otra travesura... Los mayores, sin embargo, parece que hemos
perdido un poco de nuestra ilusión. Así que, a aprender de los peques.
3. Ellos no discriminan a
nadie. A los niños, les da igual de qué color tenga la piel su compañero de
juegos, si es zurdo o diestro, si es rubio o moreno, les da prácticamente
igual. Algunos adultos, parece que llevan eso del rechazo a la orden del día.
4. No tienen sentido del
ridículo. Si un niño de tres años se cae en el parque, sino se ha hecho
daño, se levanta y sigue a su rollo. Si un adulto se cae en plena calle, lo
primero que dice es: por dios, qué vergüenza. He hecho el ridículo. Pues no, señores
y señoras, ¿por qué no hacemos como los niños?
5. Se emocionan con las
pequeñas cosas. ¿Habéis visto lo maravillados que se quedan los niños
cuando hacen pompas de jabón? Y no deja de ser algo sencillo y fácil de
conseguir. Pero ellos lo viven. Por eso, los mayores tenemos que dar prioridad
a esos pequeños detalles que pueden hacer todo un mundo.


6. Siempre son ellos
mismos. Los enanos, son cien por cien auténticos y naturales. No buscan
agradar ni contentar a nadie. Y no sienten vergüenza de serlo. ¿Cuántas veces
hemos dejado los adultos de ser quiénes realmente somos por los demás?
¿Qué os ha parecido la lista?
¡Ya nunca más podréis decir que los
niños no nos enseñan nada!
Me gustaría que me contaseis lo que os ha aportado a
vosotros tratar con niños pequeños, ya sean sobrinos, hijos, primos, hijos de
amigos...
Entonces, ¡hasta aquí el post de hoy!
Espero, que el próximo lo escriba
con las dos manos. ¡Buen fin de semana para todos!
Publicado por Mel redactora de www.nuncajamasyyo.com"
¿Qué añadir a esta maravillosa lista?
Por mi parte, la sinceridad.
Soy una persona "enamorada" de las personas que son sinceras, pero sinceras de verdad (a medias no me vale jejeje). Y los niñ@s, lo son. Suelen ser los seres más transparentes del mundo. Siempre he pensado que si el mundo fuese gobernado por l@s niñ@s, todo nos iría mejor.
Trabajé durante un tiempo, en mi época universitaria, de canguro y profesora particular de un niño italo-español, y creerme si os digo, que fue una de las experiencias más maravillosas que he tenido a lo largo de la vida.
Cada día aprendía algo nuevo con ese loco bajito, que por cierto hoy en día me pasa unos dos palmos Jajajaja.
Ahora, estoy en fase tía molona de mi sobrino de casi dos meses, y estoy convencida que lo que voy a aprender con mi Pequeño guerrero, ni en las aulas de las universidades, ni los libros, podría aprenderlo.
ACTUALIZACIÓN: El Mundo de Mel ya no se encuentra en el blog, ya
que en la actualidad la autora ya no colabora en Mi meta, tu salud.
¡Un saludo maj@s!
cuanta razón!!! podemos aprender un montón de ellos, y sobretodo la facilidad que tienen de pasar de enfadarse con otro niño y a los tres segundo se les olvida y son tan amigos. Muchos adultos rencorosos tendrían que tomar buena nota...
ResponderEliminarun beso guapísimas y feliz finde!!!
¡Hola tesoro! Que razón tienes.... L@s peques no suelen ser rencorosos, otro punto a favor para que de una vez dirijan el mundo Jajajaja
EliminarBesos cielo feliz fin de semana
Cuanta razón! No discriminan, no juzgan, solo son ellos!
ResponderEliminar¡Hola! Sí, ¿verdad? ^_^
EliminarQue verdad tan grande .no son rencorosos , nos transmiten alegría y inocencia que falta nos hace
ResponderEliminarUn beso guapa
¡Hola cielo! Pues sí, deberíamos aprender de esos locos bajitos, que son sabios gigantes.
EliminarBesotes guapa
Me gusto mucho tu post, tienes razón en los ojos de un niño el mundo es diferente, si te brinda abrazo o una sonrisa sabes que es algo sincero, verdadero, Sigue asi, saluditos :) ;)
ResponderEliminarMuchas gracias guapa, pero el mérito es de Mel, que siempre nos trae temas súper interesantes.
EliminarBesos
No he podido evitar tararear la canción de Serrat mientras leía el post (ya sabes que yo tengo una facilidad increíble para que se me peguen las canciones..), y tampoco he podido evitar asentir con todas las afirmaciones que hace Mel, porque son totalmente ciertas, lo mismo que la sinceridad: un niño siempre te dice lo que piensa, sin paños calientes, y a veces una mirada suya dice mucho más de lo que podría expresar con palabras. Esas facultades las perdemos con la edad, por el afán o el esfuerzo de disimular, o de aparentar, o simplemente, de convivir con los demás sin salir maltrecho! jajajaja. Pero estaría bien conservar algo de lo que fuimos cuando niños, sería mucho más divertido! Un beso grande, preciosa!
ResponderEliminar¡Hola cielo!
Eliminarjajaja Te entiendo, o me puse la canción en modo bucle cuando estaba editanto el post.
Son verdades como puños, desgraciadamente vamos perdiendo todo eso con la edad, por eso en parte, cuando me dicen en según que ocasiones "que cría eres", para mí es uno de los piropos más grandes del mundo. Porque ojalá los adultos son pareciéramos más a esos sabios gigantes. ^_^
Besos tesoro
Estoy de acuerdo en todo lo que dices, excepto en lo de que "NO discriminan a nadie". Hay veces que los niños/as son muy malos y cuando hacen el vacío a un niño se lo hace el resto también, o cuando se meten con un niño, lo hacen los demás también guiados por lo que hace la mayoría...Hay veces que los niños pueden ser muy crueles con otros niños. No digo que lo lleven innato en ellos, sino que creo que por desgracia lo aprenden muy pronto de los mayores. Nosotros debemos aprender todo lo bueno que nos aportan los pequeños e intentar no enseñarles no malo nuestro. Besitos.
ResponderEliminar¡Hola!
EliminarPor supuesto que hay niños que son, y con perdón, como la peste, ya sea por su carácter, su forma de ser... Pero ¿no será que esos niños siguen el ejemplo de alguien? Y no me refiero de los padres sólo.
Pero bueno, en sí, en su esencia más pura, los niños no suelen ser así, creo que son factores externos que los influyen.
Toda la razón... debemos aprender lo bueno de ellos, e intentar no enseñarles lo malo nuestro.
Besos guapa
Un post muy interesante y cargado de razón! deberiamos sacar ese niño que llevamos dentro!
ResponderEliminarhttps://planetasingular.wordpress.com
¡Hola guapa!
EliminarGracias, Mel siempre nos trae posts súper interesantes de lo que podemos aprender mucho.
Gracias por pasarte por el blog y comentar ^_^
Besos
Si me dijeran de volver a ser un niña otra vez no lo dudaría en ningún momento, ya que son felices con lo justo y necesario, yo aprendo mucho de mi sobrina como es de inteligente y que pasa de enfadarse a reírse a carcajadas en 0 coma. Una entrada que tiene mucha razón.
ResponderEliminarBesos!
¡Hola guapa!
EliminarCelebro que te haya gustado. Sí, esos pequeños seres son más inteligentes que los adultos. Se centran en lo bueno de la vida, y lo demás no existe... Yo tampoco dudaría en volver a ser una enana
Besos guapa
Espectacular, un post que encierra muchísima verdad, lo veo a diario con mi pequeña, tiene tres años y es la alegría personalizada, eso y su vitalidad son lo que más envidia me da.
ResponderEliminarQue pases una buena semana. Bsitos.
¡Hola tesoro!
EliminarQuienes tenéis un peque en casa, tenéis al mejor maestro del mundo. Así que, aprovechad, que como con ellos no aprenderéis con nadie.
Besos y feliz semana guapa
Yo agregaría la confianza, cuando eres niño confías en todo el mundo, en la buena fe de las personas que te rodean, no sabes del peligro que hay porque no lo conoces, cuando creces esto se pierde y siempre desconfías de la persona que tienes al lado en el tren, en una parada, en la fila de la compra... Es triste pero hemos perdido la confianza en el prójimo por malas experiencias propias o de otras personas :(
ResponderEliminar¡Hola guapa!
EliminarToda la razón. Cuando somos peques somos transparentes y a la vez depositamos la confianza en lo ajeno sin más. Lamentablemente es lo que tu dices, la vida es muy "perra" y nos obliga a veces a ponernos el escudo y desconfiar.
Muchas gracias por tu aportación.
Besos
Cierto, tenemos mucho que aprender de ellos :) también tienen otra cosa preciosa y es que no conocen el "no puedo" simplemente van y lo hacen, aunque a veces tenga su peligro.
ResponderEliminar¡Hola!
EliminarDí que sí, otra más. El no puedo para ellos no existe. Lo hacen, sin mas. Si se caen, se levantan, y si lo ven imposible ellos lo ven posible.
Muchas gracias por tu aportación cielo
Un beso
Que cierto lo que dices...
ResponderEliminarA mi lo que mas me gusta es la facilidad con la que te dicen las cosas sean buenas o malas y que no suelen tener maldad ni picaresca, como en todos lados hay niños que si pero por regla general es asi y me encanta que asi sea, ya cuando crecen tienen problemillas y ven la vida tal como la vemos los adultos, que pena cuando crecen.....
Besitos
¡Hola guapa! Que razón tienes. El arte de soltarlo todo es sólo suyo, y la verdad que es algo que deberíamos apreciar los adultos, aunque claro está, con ciertos límites (me refiero a las formas jejeje)
EliminarBesos