LLENANDO NUESTRO VACÍO EMOCIONAL

sábado, 23 de agosto de 2014


Todo lo que pasa por nuestra cabeza es manifestado a través de nuestro cuerpo, nuestros sentimientos se almacenan y se experimentan en el cuerpo y no en  la mente. Aunque muchos trastornos corporales influyen en nuestro estado emocional y/o mental. Por ejemplo, cuando tenemos mucho sueño y padecemos insomnio, nos crea un malestar general, despiste, pérdida de peso y apatía, entre otras cosas. O cuando tenemos mucha hambre, nos solemos enfadar y nos parece que vamos a morder a alguien.

LLENANDO NUESTRO VACÍO EMOCIONAL
"No es la emoción en sí la que causa el problema, sino la incapacidad para expresarla y liberarla totalmente, y reaccionar a la situación de un modo sano y flexible. Lo que va bien es desahogar totalmente la pena y la aflicción, aceptar la situación y rendirse a algo superior a nosotros" C. Northrup.

El vacío emocional es una terrible necesidad de falta de afecto que suele expresarse en forma de adicción: al sexo, a gastar dinero, a acumular bienes materiales....

Yo lo abordaré cuando ese vacío se expresa en forma de adicción a la comida.

Se siente en el ser un agujero negro insoportable que se trata de llenar y compensar comiendo, y sí, se obtiene un alivio momentáneo para luego volver a sentirse hambrientos de afecto, que es la autentica causa del vacío emocional.

¿Alguna vez no te has encontrado a ti mismo de pie delante de la nevera en busca de algo para comer cuando ni siquiera tenias hambre? ¿Hay momentos en los que has picoteado a pesar de saber que no era la hora de comer y luchaste para no comer porqué sabías que te embriagaría la culpa? ¿Qué hizo que comieras a pesar de saber que no debías hacerlo ya que ni siquiera tenias hambre?

Si te preguntas el por qué a ti mismo, de un modo objetivo, lo más probable es que tu respuesta sea :¡Fue un impulso! Esto significa que esa comida, el hecho de comer en este caso fue una respuesta a una emoción. En muchos casos esa emoción puede ser desagradable como la tristeza o la soledad. Aunque muchas personas comen de un modo emocional para crear una emoción placentera o para mejorar un estado emocional.

A algunas personas les pasa que al principio no saben exactamente qué es lo que les pasa. Comen de un modo compulsivo, sin darse cuenta, hasta que llega un momento en que la comida se apodera de ellos. Si están alegres, comen; si están tristes, comen; si están aburridos, comen. Todo es comer y comer, y comer por comer. Al final la comida puede con ellos, destrozando su salud, su cuerpo, y ya no tienen ilusión por nada.

En ocasiones, esta impulsividad por comer puede confundirse con la bulimia, pero no es lo mismo. Esta última es un trastorno de la conducta alimenticia que consiste en darse atracones frecuentes pero recurriendo al mismo tiempo a métodos compensatorios para prevenir el aumento de peso, como producirse vómitos, los laxantes, ayunos, diuréticos o el exceso de ejercicio físico. Pero en el caso de los comedores compulsivos estos no recurren a métodos de este tipo, pero sucede que, suelen sentirse culpables por sus actos.

LLENANDO NUESTRO VACÍO EMOCIONAL

"Si fueras capaz de observar los cambios fisiológicos que tienen lugar dentro de tu cuerpo cuando estás poseído por la rabia, el resentimiento, la ira, la ansiedad, el odio, el descontento, la envidia, los celos... cómo afectan de un modo adverso al funcionamiento del corazón, el aparato digestivo, el sistema inmunitario e incontables funciones corporales, quedaría perfectamente claro que estos estados son verdaderamente patológicos, son formas de sufrimiento y no placer." Edckhart Tolle

Para que se pueda englobar a una persona como comedora compulsiva se tiene que encontrar varias situaciones tales como:

Episodios frecuentes de atracones de comida.

Comer muy rápido.

No poder controlar la cantidad de lo que se come.

Comer aunque uno sienta que el estómago está lleno.

Comer solo.

Comer sin hambre.

Sentirse culpable y triste después del atracón.

Para poder entender lo que el alimento simboliza inconscientemente en cada persona, es muy importante revisar como el alimento va ligado al afecto.

El primer vínculo de amor se da con la madre, y esto sucede a través del alimento. El bebé llora y su madre acude a él para alimentarlo.. pero llega un punto en que el bebé no llora por hambre, sino por el placer que siente porqué su madre atiende su demanda, lo coge en brazos, lo amamanta, ... le da afecto.

Otro ejemplo de cómo el alimento simboliza el afecto se da cuando vas a visitar a tu madre, abuela... y lo primero que te preguntan es : ¿ya has comido? Es su manera de demostrar afecto. O también cuando vas a visitar a un amigo, por ejemplo que ha estado enfermo, ¿quienes de vosotros no ha llevado una caja de bombones a un enfermo? Otra manera de demostrar afecto con la comida.

Pero no quiero desviarme, o al menos no mucho, del tema y perdonadme si lo hago, pero es que es un tema con muchos matices, y amplio de tratar.

Causas y consecuencias de comer impulsivamente.

Pero, ¿por qué se llega a comer de un modo compulsivo?

Como dije antes por un intento de llenar un vacío emocional, como una manera de disminuir la ansiedad o la depresión o la tristeza... Es decir, como mecanismo de compensación.

También sucede que el comer de un modo compulsivo llega a ser un intento inconsciente de controlar una situación que la persona percibe como incontrolable, fuera de su alcance.

En otros casos es un acto inconsciente que habla por sí solo. Y es que al reprimir emociones, todo lo que no se habla, sale de todas formas: a través de lo que sentimos, pensamos, hacemos y de nuestro cuerpo. Y hay quienes al no hablar lo que sienten, se lo "tragan" de un modo literal.

Desde la psicología se cree que es una fijación en la etapa oral del desarrollo psicosexual (etapa de los 0 a los 2 años), debido a un trauma sufrido por frustración de la demanda de alimento o su opuesto, un exceso de gratificación.

Otra de las causas de comer de un modo compulsivo son los malos hábitos como comer frente la televisión, comer en exceso y sin apetito en el cine, etc. Estos hábitos no permiten que exista consciencia de cuales son las cantidades de alimento que consumes realmente. 

Llenando nuestro vacío emocional...

Tenemos que ser conscientes de que hay un ciclo en toda adicción:

La persona que siente ansiedad, depresión, que siente la necesidad de comer para calmar esa ansiedad, tiene ese periodo impulsivo, el "atracón".

Aunque siente alivio, le dura poco tiempo.

Aparece un sentimiento de culpabilidad.

Vuelve a comer de un modo compulsivo en un intento de calmar ese sentimiento de culpa.

Y el ciclo vuelve a empezar...

¿Qué consecuencias nos trae el comer de un modo compulsivo?

Problemas de vesícula biliar.

Problemas gastrointestinales.

Hipertensión arterial.

Hipercolesterol.

Diabetes.

Enfermedades cardiovasculares.

Depresión.

Intentos desesperados por bajar de peso que representan grandes riesgos para la salud física y emocional.

Recomendaciones.

Aceptar tu problemas con la manera en que comes es el primer paso. Eso te permitirá hacer algo para cambiar la situación.

Algo fundamental es que aceptes como eres. Ámate sin importar tu talla, pero por ese amor a ti mismo/a, cuídate física y emocionalmente.

Encuentra cuáles son los vacíos reales para que trabajes en ellos y no los cubras con esa adicción a la comida. Trabaja para llenarlos con amor propio NUTRE TU AUTOESTIMA.

Busca ayuda profesional, este trastorno de alimentación requiere un tratamiento integral, la terapia es parte clave en este proceso de aceptación, motivación y cambio. La terapia te permitirá cambiar patrones destructivos en tu manera de ser, sentirte, actuar, alimentarte...

Estar equilibrado psicológicamente produce espontáneamente un descenso de peso , porque la persona no necesita atiborrarse de comida para sentirse bien.

Tenemos que ir a la raíz que está en nuestro interior, tenemos que abrirnos y empezar a responsabilizarnos de nosotros mismos haciendo frente a nuestros miedos, obsesiones, depresiones... y dejar de luchar con nuestra mente. Debemos abrir los ojos y liberarnos de toda la porquería mental.
Por qué no hay mal que dure cien años, y el tu mejor aliado para superarlo todo eres .

¡Un saludo maj@s!


  

6 comentarios:

  1. Muy interesante,muchas gracias,besos

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    1. Gracias a ti por dedicar unos minutos para leerlo y escribir un comentario. Besos ;)

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  2. Es un tema muy delicado, porque no es sólo la parte física sino también la mental la que debe recibir tratamiento y control y no es fácil para muchas personas. Pero has tratado el tema con mucha claridad y sencillez, y se agradece. Besos!

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    1. Es esencial que la parte mental sea la que reciba ese tratamiento, y obvio que no es nada fácil, y más si la persona se encuentra en un estado de "bajón".
      Lo encontré un tema interesante y por eso me animé a consultarlo con amigos psicologos. Gracias por tu comentario. Un besote

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  3. Has contado cosas muy interesantes de las que no tenía idea que pudieran estar relacionadas con la comida...A tener en cuenta! Besos!

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    1. Me alegra que el post te haya parecido interesante. Eso sí, siempre tenemos que tener en cuenta que cada persona es un mundo, y cada problema también. Un saludo y gracias por el comentario. Besos

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